En el programa “ EN POSITIVO” de Radio Federal FM 98.1, el día miércoles, 1 de junio se hizo una entrevista a la hermana Sofía Valdivieso Ramos, de la Congregación SIERVAS DE SAN JOSÉ de La Reja.
Publicamos hoy la trascripción
¿Por qué estás hoy en la Radio?
Quiero compartir con todos, principalmente con la gente de la Diócesis de Merlo- Moreno, una alegría grande que tenemos. Y es la CANONIZACIÓN de nuestra Fundadora, Beata Bonifacia.
¿Cuándo va a ser la ceremonia de canonización?
Esta buena noticia la dio el Papa en febrero. Ese día con el Decreto de Canonización, dispuso que sea el domingo 23 de octubre. Acá en la Argentina será el domingo siguiente al Día de la Madre.
Si la Canonización va a ser en octubre ¿por qué elegiste este día para hablar de ella?
Porque el lunes próximo, 6 de junio, es el día que Juan Pablo II designó como la Fiesta Litúrgica de la Beata Bonifacia. …Y ya faltan pocos días para el lunes.
Cuéntanos algo de Bonifacia: dónde nació, su infancia…
Claro ¡estoy deseando hablar de ella! Bonifacia Rodríguez de Castro, nació en Salamanca ( España), muy cerca de su famosa Universidad, de padres trabajadores, una familia modesta y profundamente cristiana. Corría el año 1837. El papá era sastre, la mamá ama de casa.Tuvo varios hermanos, pero sólo su hermana Agustina llegó a su mayoría de edad .- Todo iba bien, con sencillez y mucho amor. Bonifacia pudo hacer su Primaria completa y aprender un oficio: “cordonera”.- Recibió los sacramentos de iniciación en la catedral y pronto formó parte de las “Hijas de María” de la Clerecía, iglesia de los Jesuitas.
¿Y qué nos cuentas de su juventud, de cómo le surgió la idea de fundar una Congregación?
Un suceso triste, la muerte del padre, hizo girar el curso de su juventud. Ella tenía 15 años y comprendió que la madre necesitaba su ayuda para sacar adelante el hogar.
Entonces comenzó un trabajo asalariado en el oficio en que estaba preparada: cordonera. Fueron años duros, años en los que pudo -por experiencia propia- comprender la realidad del trabajo de las jóvenes y mujeres sin otros recursos; sus carencias, sus riesgos, su falta de horizontes promocionales, su necesidad de evangelización…
Esta situación duró 13 años, hasta que su hermana Agustina se casó y entonces, madre e hija, crean su modesto pero propio taller. Intensifican su vida de piedad y toman por directores espirituales a los padres de la Compañía de Jesús.
¿Bonifacia tuvo amigas? ¿qué se sabe de sus amigas?.
Bonifacia era muy bondadosa. De modo que las chicas que iba conociendo entre su taller y la Clerecía, pronto se aficionaron a su compañía y tan bien se sentían a su lado, con sus ejemplos y consejos, que decidieron reunirse cada domingo en su casa. Así se formó la "Asociación Josefina". Esto ya con la bendición del padre Butiñá, que ahora era el director de Bonifacia.- Este jesuita catalán, emprendedor práctico para “la mayor gloria de Dios”, grandemente preocupado por el proletariado naciente, captó pronto la belleza del alma de Bonifacia, su preparación y su capacidad de acoger a las jóvenes y mujeres.
Y entonces… Bonifacia le propuso al Padre…
No, no, ella no le propuso nada más que deseaba consagrarse totalmente al Señor y que había pensado podría ser en el cercano Monasterio de Dominicas.
¡Sorpresa! ¿Y entonces?
Pues fue entonces cuando el padre Butiñá, nuestro querido Fundador, se armó de claridad y decisión para expresarle a Bonifacia otro posible plan de Dios: una Congregación de obreras que cuidara, promocionara, evangelizara, a las jóvenes y mujeres pobres sin trabajo, precisamente a través del trabajo codo a codo con ellas. Y así surgieron los TALLERES DE NAZARET, nombre que se daría a las casas, en las cuales la bolsa era común para religiosas y laicas y “ la principal regla de vida y de gobierno era la caridad”.-
Tal proyecto, sin duda, tendría mucha aceptación y ayuda, pues se trataba de un tan gran bien para la sociedad ¿no?
Nada de eso, al contrario. Pareció “cosa de locos”, principalmente a gran parte del clero. Era lo que se comentaba en la ciudad. No se podía comprender, se salía de los moldes de vida religiosa de la época. Tan es así que pronto tuvo formales adversarios, que -sin duda con buena intención- intentaron y consiguieron torcer el rumbo de la nueva Congregación.
Bonifacia fue fiel a la idea fundacional, con la que Dios inspiró al padre Butiñá y a la que ella había entregado todo.
Como el padre Butiñá no estaba en Salamanca, pues coincidió la expulsión de los Jesuitas, Bonifacia se encontró sola, incomprendida, maltratada, depuesta del servicio de superiora. Confió en la Providencia y siguió adelante, fundando un nuevo Taller de Nazaret en la cercana ciudad de Zamora, con la bendición de ambos Obispos.
¿Cómo transcurrió su vida en Zamora?.
Comenzando, otra vez de cero, en suma pobreza, confiando siempre en la Providencia, con su trabajo asiduo, fue sacando adelante el Taller y atendiendo a jóvenes y niñas, promocionándolas en su dignidad humana y cristiana, mediante el trabajo, siempre mirando el Taller de Nazaret, ya que “ la Sagrada Familia ha de ser siempre nuestro modelo”.- Así transcurrieron 23 años más. Murió en Zamora en 1905 y el pueblo exclamó “era una santa”.
¿Cuándo y por qué fue su Beatificación?
Tuvo lugar en Roma en el 2003, por el Papa Juan Pablo II.- El Papa elogió sus virtudes heroicas: su perdón incondicional, su caridad sin límites, su humildad maravillosa, su amor a Dios ferviente, su trabajo" hermanado con la oración”, como es lema – herencia del Fundador…, en fin, como dijo el Papa “Bonifacia dejó a la Iglesia un nuevo camino de espiritualidad del trabajo”. El que se humilla se verá ensalzado y así fue y así definitivamente será con su titulo de SANTA.
Y las Siervas de San José ¿cuándo llegaron a la Argentina? ¿por dónde andan?
Las hermanas llegaron en 1928 y fueron directamente a Los Toldos, donde se hicieron cargo de un Asilo, actualmente HOGAR BONIFACIA, de Minoridad. Realizaron diversas tareas en muchos lugares. Algunos tan distantes como Chaco y Patagonia, y tan diferentes como escuelas y Talleres y Villas.
Hoy nuestra presencia es en Los Toldos, Tucumán y Capital Federal; y en Gran Bs. As. tres Comunidades: Una en Villa Martelli y dos en nuestra diócesis: en Bº Moreno 2000, casa que es Prenoviciado y en La Reja, escuela, junto con la presencia en capillas y barrios.
Volviendo a la Canonización ¿tendrán muchos festejos?
De eso podremos hablar otro día. Digamos hoy que se ha optado por un criterio de austeridad y solidaridad. Reconocemos que la canonización de Bonifacia es un regalo de Dios, no solo para las Siervas sino para la toda la Iglesia Católica. Estamos agradecidas y queremos colaborar para que a todos llegue ese don, que es ejemplo de vida evangélica y de compromiso con el mundo trabajador pobre, especialmente con la mujer.
Muchas gracias por esta oportunidad.
Para cualquier pregunta, estampas o más informaciónescriban a ssjlareja@hotmail.com . El teléfono es (0237) 4626 648
También pueden visitar la pág. Web: www.siervasdesanjose.org
Y la pág. www.sfamilialareja.com.ar